Estética y Salud: dos sinónimos.

Escuchamos tan a menudo las palabras estética y salud juntas, que parecen la misma cosa, pero hay una gran diferencia que las separa.

Empecemos por saber el significado de ambas para entenderlo mejor. Lo llamativo es que, el significado de la primera, todavía no está muy claro, así que te daremos uno de ellos: 

Salud:

Es un estado de bienestar o de equilibrio. Dicho estado puede ser subjetivo, donde un ser humano asume como aceptable el estado general en el que se encuentra. O puede ser objetivo donde se constata la ausencia de enfermedades o de factores dañinos en el sujeto en cuestión.

¿Ha quedado claro? ¡Pues a nosotros no tanto!

El primero dice que si reconocemos que estamos bien, tenemos salud. Pero… ¿el mero hecho de que una persona diga estar bien ya le concede un buen estado de salud? ¿Qué pasa su criterio? ¿Será realmente acertado?

¡Ese es el punto del que queremos hablarte!

Aquí algunos ejemplos:

Te contaremos varios argumentos de las personas que nos hemos cruzado en el camino como profesionales del área de la salud.

“Trato de no comer mucho durante el día. A veces nada, para poder comer helado que me vuelve loca en las noches”

¿SALUD o ESTÉTICA?

“En invierno no me cuido tanto. Como todo lo que quiero y no me importa engordar porque como llevas más ropa no se nota tanto la grasita. Un par de semanas antes del verano hago la dieta Détox, salgo a correr en ayunas y como nuevo”.

¿SALUD o ESTÉTICA?

“Me considero una persona muy sana. Corro una hora y media diaria para bajar las copas del fin de semana”.

¿SALUD o ESTÉTICA?

A que tú también has escuchado o dicho esto alguna vez…

Antes de sacar conclusiones queremos compartirte el significado literal de estética.

Estética:

Cuando hablamos de la estética nos referimos a la rama de la filosofía que estudia la esencia y la percepción de la belleza.

¿Crees que tiene alguna similitud con salud? ¡A qué no se parece en nada! ¿Entonces por qué las confundimos?

Déjanos contarte algo…

La gran mentira…

Como antes mencionábamos, la mayoría de las personas que han venido a nosotros diciéndonos que quería mejorar salud, de lo que realmente se preocupaban era de su estética. Y esto no es algo malo en absoluto, pero si es muy importante saber cuál es nuestro verdadero objetivo, ya que es la única forma de lograrlo.

Varios eran los motivos que les traían a nosotros. Nos decían que ya estaban cansados de no llevar una vida saludable y que querían un cambio. Que estaban preocupados por lo que su médico les había dicho o que habían pasado por una mala experiencia por culpa de su salud y que ahora sí se acabó esto.

Sin embargo, esa verdad estaba disfrazada por otra de sus verdaderas preocupaciones… su ESTÉTICA. Bajar de peso, aumentar la masa muscular, tener el “cuerpo ideal” de alguien que siguen en las redes sociales, etc. era una realidad paralela al motivo que les trajo a nosotros y dicha realidad iba cobrando cada vez más fuerza hasta convertirse en la principal y única preocupación.

Hablaban de salud refiriéndose a estética. Pero no os sintáis mal si también lo habéis hecho. A todos nos gusta vernos bien y eso no es un problema. El gran problema es cuando sufrimos por ello. 

¿Por qué relacionamos la salud con el sufrimiento?

Empezaremos compartiendo lo que para nosotros significa la palabra salud.

Salud:

Es el equilibrio entre un buen estado físico, mental y espiritual, indispensable para disfrutar de una óptima calidad de vida.

¿Suena fácil no? Pues al principio no lo es tanto, pero cuando lo logras, no solo es fácil, si no que lo disfrutas y te hace muy feliz. Está demostrado que se puede vivir sin muchas cosas, pero cuando nos falta salud, todo se vuelve más complejo.

Mejorar nuestra salud no implica que para ello debamos sufrir. Más bien eso sucede cuando intentamos mejorar nuestra estética. Seguimos confundiendo ambos términos y por eso hacemos una mala relación.

Sufrimos interminablemente luchando por lograr una aspecto físico, que en la mayoría de los casos, no vamos a lograr nunca. Y no es porque no tengamos la capacidad, sino porque no tenemos la predisposición ni la fuerza de voluntad para ello. 

Deseamos tener la misma estética de personas que vemos en tv, internet, etc. pero ninguno sabemos lo que eso implica. No es vuestra culpa, porque parte de su negocio está ahí, en ofrecer falsas esperanzas para que consumas sus productos.

En muchas ocasiones, esas personas toman decisiones, que están muy lejos de ser saludables, para lograr sus resultados. Sin embargo, ellos aceptan dichas repercusiones con el fin de lograr esa estética que aparentan lograr mediante un camino sencillo, rápido y natural.

Cuando consumimos sus dietas, sus consejos, sus servicios, etc. y nunca llegan los resultados es cuando aparece el citado sufrimiento. Pero recuerda, no sufres por la salud, sino por la estética, ya que lo que te mueve a tomar esas acciones es la vanidad y no tu decisión consciente de darle a tu cuerpo y tu mente lo mejor para ellos.

¡Cuidado! Hay decisiones que son irreversibles.

A todos nos gusta vernos con un abdomen marcado, con menos celulitis en las piernas, con un glúteo firme y con mayor masa muscular, pero no nos importa tanto si nos estamos nutriendo bien, si descansamos lo recomendado por las noches, si hacemos lo correcto para cuidar nuestro organismo, etc.

Si nos dan a elegir entre un cuerpo 10 a corto plazo o un cuerpo sano a largo plazo, terminamos eligiendo lo primero. ¡Total… a nosotros nunca nos va a pasar nada porque somos jóvenes y ahora nos encontramos bien!

¡Ya!

¿Te has parado a pensar en las posibles consecuencias de tomar una mala decisión para mejorar tu estética? Si lo hicieras, podrías evitar situaciones irreversibles que perjudican tu salud. Así que, si eres de los que realmente creen en un nuevo concepto de salud, donde el sufrimiento no está en nuestro diccionario y la prioridad es mejorar tu calidad de vida ahora y para siempre… ¡Bienvenido a nuestra comunidad!

Una vez puesto sobre la mesa la gran problemática que está ocasionando en todos nosotros confundir ambos términos, vamos a compartirte que significa para nosotros el concepto de estética.

Estética:

Es el canon de belleza subjetivo creado por una persona, una comunidad o una sociedad.

Esto significa dos cosas:

• Lo primero es que sigue teniendo un valor subjetivo.

• Y lo segundo es que es cambiante en el tiempo.

Lo que para algunos, alguien o algo puede ser bello, para otros no, y lo que este año está de moda, el año siguiente puede que ya no lo esté.

Si tenemos en cuenta que se trata de nuestro cuerpo, nuestro organismo y nuestra salud la que se ve afectada en cuando realizamos cambios, ponernos a la moda puede implicar cuestionar nuestra salud.

Pongamos un ejemplo del valor subjetivo:

Actualmente está de moda, estéticamente hablando, tener poco % de grasa corporal y un gran volumen muscular.

Para que una mujer pueda llegar a un % de grasa muy bajo, tendrá que recurrir a productos farmacológicos tan fuertes como hormonas masculinas, ya que por naturaleza la mujer tiende a acumular más grasa por cuestiones de maternidad, entre otros motivos.

En el caso de los hombres es un poco más fácil bajar la grasa corporal, pero elevar el volumen de masa muscular manteniendo dicho % graso bajo ya empieza a complicarse. La opción más fácil y rápida, es jugar a ser científicos y probar diferentes combinaciones de hormonas y jeringas.

En ambos casos, aún cuando no se recurre a dichos productos farmacológicos para lograr bajar la grasa corporal de manera cuantitativa, puede ser un riesgo para la salud.  Los niveles muy bajos de grasa pueden provocar trastornos hormonales severos e irreversibles ya que las hormonas necesitan la grasa para su correcto funcionamiento.

¿Que ocurrirá si nuestra salud se ve perjudicada en el camino de logra ese cuerpo 10? ¿Será el valor subjetivo de la estética de una sociedad el que nos salve de nuestros problemas de salud? ¿Tomamos esas decisiones de manera consciente o son condicionadas por los cánones de belleza actuales? ¿Podremos mantener esa estética para siempre? ¿Y los problemas irreversibles, serán también para siempre?

Pongamos un ejemplo del valor subjetivo cambiante en el tiempo:

Según el contexto en el que nos encontremos, las curvas femeninas exageradas pueden resultar muy interesantes, tanto para la propia mujer como para el hombre. Hemos visto a mujeres sufrir porque sus cuerpos no tenían naturalmente ese tipo de curvas lo que les llevaba a un estado de desesperación intentar conseguirlas. En ese punto de inflexión, muchas llegaron a tomar decisiones poco acertadas para acercarse un poco más a su objetivo, pero no se plantearon si eso podría tener repercusiones negativas en el tiempo.

Las que lograron su meta, estaban realmente contentas mientras ese canon de belleza persistía, pero en esta sociedad, cada vez más cambiante, nada es eterno y lo que hoy está de moda mañana no lo esta. Es ahí donde aparece el problema, cuando la masa muscular lograda o incluso la grasa corporal adquirida para tener dichas curvas no se puede revertir. Lo que antes era trendy ahora es vintage. Lo que en una cultura se admira en otra pasa desapercibida. Lo que a unos les gusta a otros no, etc. etc.

¿No te parece injusto que tu salud, tu felicidad y tu bienestar dependa de una moda subjetiva impuesta por un entorno y un momento puntual en el tiempo?

Resumiendo…

Cuando nos encontremos en esta tesitura de saber si lo que buscamos tiene que ver con mejorar la estética o la salud, lo mejor que podemos hacer es trabajar desde la raíz del problema. Para ello debemos ser honestos con nosotros mismos y una una vez lo logremos, podremos enfocarnos en como conseguir ese cambio.

La mejor opción para dejar de sufrir por la estética es aceptarla y rendirte ante ella. Eliminarla de tu camino como un conflicto y entenderla como algo secundario a lo verdaderamente importante: tu SER y tu SALUD.

Una vez consigamos desvincularnos de la parte más superficial, estaremos listos para iniciar el camino de la salud y de la mano de ésta, vendrá la estética.

Técnica Minimalista para acabar con el sufrimiento de la estética.

¿No te sientes más liviano al saber que existen soluciones a ese gran problema por el que llevamos sufriendo tanto tiempo?

Aplica durante esta semana la siguiente técnica minimalista. Repítela 2 veces al día. Sólo te llevará unos segundos y la felicidad será eterna!

Cuando despiertes por la mañana y vayas al baño, inhala profundo, mírate en el espejo y repite 2 veces:

– “este cuerpo no significa nada”, “esta imagen no significa nada”.

– “este cuerpo no significa nada” ,“esta imagen no significa nada”.

Por la noche cuando vayas a dormir, lava tu cara y vuelve a repetirlo siempre en calma y consciente del momento presente.

Esta técnica trabaja sobre tu mente para lograr desapegarte de lo material. Aceptar tu cuerpo como lo que es, solo un envase que contiene tu verdadero SER, hará que podamos continuar el camino para moldear dicho envase y dejar de sufrir.

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